jueves, 29 de abril de 2010

Lo escondido de las palabras

Si hubo algo,
en la ágora se quedó,
Y no traspasa
ni tiempo
ni persona.

Quién diría ahora
ahogándose todo en un saludo
la formalidad de los recuerdos escondidos
la mentira hecha tangible.

Remover las aguas de una sábana,
hundirse
y que la profundidad
se ejerza:
En cada tendón antes dormido,
reventando venas de besos pasados.

Quedando después los dos
en lo que hubo
en la despedida de todos los días,
en los reencuentros sin
esta monotonía... de apnea continua
(algún día).